Aumentar la resiliencia con la digitalización, la automatización y la ‘cloudificación’ será clave en los procesos de comunicación de las compañías
En un contexto protagonizado por la guerra en Ucrania, la crisis de la cadena de suministro y la desglobalización, los sistemas económicos se encuentran actualmente bajo una tensión considerable. Mientras tanto, el aumento de la inflación y la escasez de personal cualificado agravan la situación. Para que los negocios puedan seguir funcionando sin interrupciones frente a estos desafíos, las empresas deben replantearse sus procesos de comunicación. Retarus, proveedor de servicios en la nube para empresas, ha identificado cinco tendencias que las empresas deberían tener en cuenta para su comunicación empresarial en 2023.
1. La ciberresiliencia como parte integral de la estrategia empresarial
En tiempos de incertidumbre, las empresas deben prever ataques cada vez más engañosos contra sus infraestructuras de comunicación. El ransomware sigue siendo la principal amenaza, siendo el correo electrónico la puerta de entrada más frecuentemente aprovechada. Dado que los ciberataques tienen un impacto directo en el éxito de la empresa, la ciberresiliencia debe convertirse en una preocupación a nivel directivo. Para garantizar que los principales procesos e infraestructuras sigan funcionando independientemente de circunstancias extraordinarias, los planes de continuidad de negocio deben incluir estrategias para hacer frente a los peores escenarios. Esto incluye estar equipado con mecanismos integrales de protección contra amenazas avanzadas. Por ejemplo, una solución de continuidad del correo electrónico independiente de la propia infraestructura de la empresa puede permitir que la comunicación por correo electrónico continúe sin problemas en situaciones de emergencia. También los conflictos geopolíticos aumentan el riesgo de ciberataques procedentes de determinadas regiones. Con servicios como Retarus Predelivery Logic, se pueden aislar preventivamente mensajes en función de su GeoIP, ya sea por exigencias de seguridad o por directrices internas de cumplimiento.
2. ‘Cloudificación’ sostenible de los modelos de negocio
Desde la pandemia de COVID-19 y los acuerdos relacionados con el trabajo desde casa, las opciones de comunicación digital y la colaboración virtual se han vuelto omnipresentes. Mientras tanto, la computación en nube se ha establecido firmemente en los departamentos de TI. Al mismo tiempo, las empresas se ven obligadas a responder a las importantes presiones de costes asociadas y los responsables de los presupuestos se ven obligados a planificar de la forma más rentable y sostenible posible. En este sentido, los servicios en la nube también ofrecen una solución viable: son flexibles y escalables, lo que significa que pueden personalizarse para satisfacer exactamente las necesidades actuales, evitando al mismo tiempo el exceso o la falta de recursos. Como resultado, las ofertas innovadoras pueden introducirse en el mercado más rápidamente y los costes se pueden controlar mejor.
Las empresas se benefician especialmente de los proveedores de servicios en la nube que permiten liberar al departamento de TI de la propia empresa de la carga de las ofertas de plataformas, servicios gestionados y soluciones innovadoras. Tales proveedores brindan a las empresas la oportunidad de introducir modelos empresariales optimizados, ya que los servicios en nube facilitan actividades ágiles y permiten una comunicación directa y rápida con el mercado. En este sentido, la solución Retarus Enterprise Clouds ofrece una amplia gama de servicios que cumplen con todos los estándares sectoriales establecidos y permiten una integración prácticamente perfecta en infraestructuras locales, en la nube e infraestructuras híbridas.
3. Intensificación de la automatización en la cadena de suministro
El año pasado se demostró claramente lo susceptibles que son las cadenas de suministro a las alteraciones. Además, las empresas están sintiendo el impacto de la escasez de trabajadores cualificados como nunca. Este año será esencial que las empresas configuren sus cadenas de suministro para ser más resistentes y automatizadas. De este modo, podrán contrarrestar cualquier carencia de cualificación y aumentar su productividad. Por ejemplo, si los documentos comerciales entrantes se capturan y procesan automáticamente, una empresa puede evitar la laboriosa introducción manual de datos relacionados con los pedidos entrantes de mercancías o servicios. Las empresas se benefician de una comunicación de procesos más eficaz, un flujo de efectivo más ágil y un ahorro de costes cercano al 60% en comparación con el procesamiento manual de pedidos. Su personal experto puede volver a centrarse en la innovación y proporcionar a la empresa una ventaja competitiva decisiva.
4. Optimizar el recorrido del cliente
Las exigencias y expectativas de los clientes en relación con los servicios digitales han aumentado considerablemente desde el inicio de la pandemia. Mientras tanto, las empresas se han familiarizado más con las interacciones y los puntos de contacto digitales: una experiencia positiva del cliente es ahora un requisito crucial para el éxito de una empresa. Sólo una comunicación empresarial fiable, segura y adaptada a las necesidades de la empresa puede permitirle ofrecer los puntos de contacto críticos con los clientes que impulsen su satisfacción y fidelidad. Las empresas que no invierten en la comunicación con sus clientes salen perdiendo frente a sus competidores. Gracias a las plataformas de comunicación digital, las empresas pueden ofrecer puntos de contacto digitales como la autenticación multifactor, confirmaciones de pedidos por correo electrónico, correos electrónicos transaccionales como boletines, alertas meteorológicas por SMS y notificaciones de estado. Idealmente, estos servicios pueden integrarse perfectamente en aplicaciones empresariales o plataformas digitales mediante API estandarizadas, lo que permite su fácil adaptación para satisfacer nuevos requisitos de forma rápida y flexible en cualquier momento.
5. Normativas de protección de datos cada vez más complejas
Según la empresa de análisis Gartner, es muy probable que en 2024 el 75% de la población mundial tenga sus datos personales protegidos por la normativa de protección de datos. Las disposiciones legales desempeñan un papel cada vez más crítico, ya que los requisitos normativos evolucionan constantemente y se hacen más complejos en todo el mundo. Las empresas se enfrentan a la amenaza de elevadas multas en caso de infringir dichas normas. A la hora de seleccionar un proveedor de servicios externo, es esencial asegurarse de que cumple plenamente la normativa vigente en materia de protección de datos. Lo ideal es que el proveedor no solo cumpla todos los requisitos del GDPR, sino también las normas sectoriales pertinentes y los requisitos de cumplimiento específicos de la empresa. Fundamentalmente, todos los datos deben procesarse localmente en centros de datos preparados para auditorías. Algunos proveedores como Retarus garantizan contractualmente este compromiso con la protección de datos en los acuerdos de nivel de servicio con sus clientes.